Renovación socialista

Los dos pasos dados por Alfredo Pérez Rubalcaba desde que hizo público que tiraba la toalla han sido muy dispares, pero a la vez complementarios. Me explico. Primero adelantó la elección orgánica del futuro secretario general del PSOE  a la del candidato a la Moncloa, desatando las críticas de relevantes militantes, como Chacón y Madina, quienes son muy conscientes de su escaso predicamento en el aparato del partido. Después, manifestó su simpatía, a la espera de un encaje legal, para abrir la elección del secretario general a todos los afiliados del PSOE, desbordando el colegio electoral clásico de un partido de izquierdas: las federaciones; es decir, el aparato. Con esta concesión contentaba a lls díscolos del partido, que consideran imprescindible abrir el partido a la sociedad y creen que una elección de las bases socialistas es el primer paso para ello.  Ambas medidas son evidentemente dispares, pero a la vez complementarias porque abren formalmente la decisión a mayor número de personas, aunque permiten un control del proceso por pocos, en concreto por el aparato. Y prueba de ello es que casi todos los secretarios generales de las Federaciones ya han pedido publicamente a Susana Díaz, la presidenta de la Junta de Andalucía que se presente como candidata a la secretaria general del PSOE. Con ello, la intención es laminar a los díscolos y presentar a alguien del aparato que luego sea refrendado por las bases.  El procedimiento no difiere mucho del tradicional: la elección la deciden unos pocos y los más se limitan a aclamar al propuesto.  Nada que objetar sobre una práctica habitual, que será reiteradamente presentada como plenamente democrática. O, mejor dicho, sí cabe una reserva, aquella nacida de un hecho incontestable: Susana Díaz no ha sometido su candidatura en una elección popular en su vida.

La casta política

La sentencia sobre el corrupto exconsejero valenciano Rafael Blasco nos ilustra sobre un fenómeno instalado como un cáncer en nuestro sistema, sin con ello pretender generalizar ni creer, por supuesto, que todos los políticos sean iguales. Vayamos primero con los hechos. Blasco es un claro ejemplo de transfuguismo. Desde sus inicios en el FRAP, organización terrorista que luchó contra el franquismo, al PP, pasando por el PSOE. Ello nos muestra la capacidad de la elite de cambiar para mantenerse en la cùspide social. Pero lo más relevante es la red de poder generada por este personaje. Su hermano Francisco presidió la Diputación de Valencia. Su mujer, Consuelo Ciscar, fue la secretaria del entonces presidente de la Generalitat Valenciana, Joan Lerma, y más tarde directora del IVAM, uno de los museos de arte contemporáneo más relevantes de nuestro país y del mundo. Su cuñado, Crprià Ciscar, fue consejero de Educación de la comunidad Valenciana y secrretario de organización del PSOE. Su hijo, el artista Rablaci, se vio favorecido en su carrera exponiendo en el prestigioso IVAM. Ahí es donde está el problema: en cómo las elites tejen sus influencias y contactos para perpetuarse en el poder. Eso es, predisamemte, lo que ha puesto de relevancia el discurso de la fuerza alternativa exitosa de las últimas elecciones: Podemos. Y probablemente ahí ha radicado su éxito: en la denuncia de la "casta política", a la que sin duda hay que regenerar.

El invierno árabe

Tres años después, ¿qué queda de la revoluciön egipcia, de aquel fulgor que se bautizó como la primavera árabe? Nada. Los militares se aprestan a volver de iure al poder tras las elecciones que darán el triunfo al general Al Sisi. Se cierra asì un ciclo que se inició con el levantamiento contra el general Mubarak, último representante hasta entonces de la casta nacionalista militar, prosiguió con unas elecciones democràticas que dieron el poder a los islamistas Hermanos Musulmanes y finalizó con un golpe de Estado, que ahora legaliza la posición nuevamente dominante del estamento militar, un verdadero Estado dentro del Estado egipcio. En todo éste proceso, las fuerzas laícas y democráticas han sido incapaces de hacerse con el poder y dirigir la apertura de un país que desde la Revoluciön Nacionalista de 1952 protagonizada por el Movimiento de Oficiales Libres, que puso fin a la Monarquía, ha estado en manos de los militares. Primero con Nasser, el héroe de la Segunda Guerra Árabe-Israelí, que reprimió al islamismo. Luego con su sucesor, Sadat, asesinado precisamente por los islamistas, Y posteriormente con Mubarak, el tercero, quien acentuó el giro occidentalista del nacionalismo egipcio. Ahora, llega al poder Al Sisi. Nada ha cambiado en Egipto.

La Europa de las naciones

La Comisión Europea que nazca de las elecciones europeas vividas esfará marcada por dos condicionantes: la alta abstención sufrida que ha llevado a que casi seis de cada diez europeos no hayan acudido a las urnas  y la votación en clave nacional experimentada, que llevará a la difícil constitución de una mayoría sólida en el Parlamento europeo, ante el retroceso del bartidismo clásico. En Francia ese bipartidismo ha saltado por los aires con la aparición como alternativa de gobierno del Frente Nacional, un partido xenófobo y ultranacionalista que ha sido apoyado especialmente por las nuevas generaciones. En Reino Unido, otro partido xenófobo y nacionalista, el autoproclamado Partido de la Independencia de Reino Unido ha presentado sus credenciales y ha relegado a los partidos tradicionales: conservadores y laboristas. El UKIP ha obtenido unos resultados espectaculares no solo en Inglaterra, sino también en Gales y Escocia. Habrá que ver como influye el desembarco del UKIP en el debate independentista de esta última region. También en Bélgica y en España hemos asistido a un aumento del voto nacionalista, que influirá igualmente en el debate identitario de Flandes, Cataluña y el País Vasco. Hasta Alemania ha visto como crecían otras alternativas a democristianos y socialdemócratas. En Italia, pese al triunfo claro y rotundo de la izquierda, se mantienen los antisistema de Beppe Grillo. Se trata de una nueva Europa con menos bipartidismo, exacto reflejo de sus divisiones nacionales. 

Herido, pero no muerto

Por primera vez desde 1982, el PP y el PSOE no alcanzan el 50% de los votos en unas elecciones. Evidentemente se trata de una crisis del bipartidismo. El PP se deja dos millones y medio largos de votos con respecto a las elecciones europeas de 2009. En el caso del PSOE, la sangría parece imparable y el partido que hace treinta dos años era hegemónico en España necesita de una profunda catàrsis que impida que pierda su relevancia política lograda desde el inicio de la Transición Democrática.  Pero esta debacle socialista, general en toda España salvo en Andalucía, tampoco repercute en la aparición de una clara alternativa en la izquierda. IU avanza considerablemente, pero ve como aparece una formación rival, Podemos, capaz de hacerle sombra hasta el punto de arrebatarle el tercer puesto en Madrid. La existencia de estos dos focos permite al PSOE mantener en dos millones de votos la diferencia con la primera de esas dos formaciones. También se asientan los partidos centristas, como UPyD y Ciudadanos, arrebatando ese espacio al PP y al PSOE, pero juntos no alcanzan ni los dos millones de votos. En suma el bipartidismo del PP y PSOE sufre su revés más importante, hasta el punto de poner en duda la alternancia en el poder mantenida desde 1982, pero la distancia con los terceros sigue siendo cuantitativamente relevante. Por tanto, el bipartidismo del PP y PSOE  y su consecuente alternancia en el poder ha recibido un serio aviso del electorado español, pero las alternativas a él se encuentran aún a mucha distancia.

Maidán

Leo en la prensa las declaraciones de un director de cine ucraniano, llamado Sergei Loznitsa, que ayer presentó en el Festival de Cine de Cannes con gran expectación un documental sobre la concentración del Maidán en Kiev. La obra está grabada mediante planos fijos durante la protesta que llevó a la deposición del presidente Viktor Yanukovich. Pero no me voy a ocupar de la calidad artìstica del documental, sino de las declaraciones de su director, quien ayer concitó toda la atención del universo cinéfilo. Preguntado sobre los dos candidatos con más posibilidades de ganar este domingo en las elecciones ucranianas, Loznitsa relativizó su importancia, señalando: "no creo que cambie mucho entre un candidato y otro. Y si finalmente sale la opción equivocada, el Maidan ya la corregirá". Todo un demócrata, así como todos los periodistas que le escucharon y todos aquellos del mundo de la farándula que ayer agasajaron a este director tan respetuoso con el resultado de las urnas. Sin duda.

Patética Europa

Después de meter el palo en el avispero ucraniano y recibir el zarpazo del oso, la Unión Europea está ahora implorando a Vladimir Putin que no corte el suministro de gas a Kiev. Pero no lo hace por solidaridad con los hasta ahora defendidos nacionalistas ucranianos, sino por propio interés. Salvo España e Italia, el resto de los paìses de la Unión Europea dependen del gas ruso, por lo que Bruselas teme un aumento de su precio si se corta el suministro. Moscú acaba de firmar un gran contrato de exportación con China, diversificando su mercado y fortaleciéndose con ello. En cambio, la UE depende más que nunca de Moscú. Patético.

Un mundo multipolar

La imagen de Putin con su homólogo chino, Xi Jinping, nos muestra la realidad de un mundo multipolar que ha puesto fin al siglo americano. Rusia, tras ocupar Crimea y desestabilizar Ucrania oriental, hace gala de amistad con China que en breve se convertirá en la primera potencia económica mundial. Y ¿Europa?  Nuestro continente y en concreto la Unión Europea, la estructura política de aquella, se lame las heridas tras intentar intervenir en Ucrania y salir trasquilada.

Crisis ética

Empezó ayer el juicio contra cuatro exaltos directivos de Caixa Penedès, acusados de administración desleal. Dicha enfidad crediticia se integró en  el Banco Mare Nostrum, que necesitó 915 millones de euros de ayudas pùblicas, cuando hace dos años se tambaleó el sector bancario. Los cuatro procesados cobraron 31 millones de euros en pensiones. Uno de ellos, Santiago José Abascal, consideró normal la ayuda de su retiro, porque de lo contrario se hubiera producido una discriminación con los que calificó de empleados comunes.  Tal alegato da una medida de la profunda crisis ética que padece nuestra sociedad.

Mal futuro preparan

La utilización por parte de Esquerra Republicana de Catalunya de la figura de Pasqual Maragall, un hombre enfermo de alzhéimer, nos da la medida de la catadura moral de los dirigentes de una formación que aspira a liderar la hipotética Cataluña independiente. El primer presidente de la Generalitat socialista de la historia asistió ayer al mitin central de la campaña electoral de ERC en Barcelona. Maragall llegó acompañado por su mujer y su hermano, Ernest, quien dejó de militar en el socialismo catalán para acudir en la candidatura de ERC a las elecciones europeoas. Pasqual Maragall lleva casi siete años aquejado de alzhéimer, una enfermedad que hace perder a quien la padece el concepto de espacio y tiempo. Ayer según llegó al mitin, fue abrazado por todos los dirgentes de Esquerra, quienes utilizaron de manera ignominiosa su figura. Algunos intentarán  justificar dicha infamia en aras de la utilidad por la sacrosanta independencia. Pero precisamente deberían reflexionar sobre una construcción nacional que no se para en consideraciones éticas. Mal futuro preparan.

Provincianos

Verdaderamente somos un país de provincianos. Ayer, día en el que los principales candidatos a presidir la Comisión Europea participaron en un debate ante las muy relevantes elecciones al Parlamento Europeo, ninguna televisión ofreció tal evento. Es más, la repercursión hoy en la prensa sobre lo dicho entonces es mínima, llamando la atención que hay algún periódico que no dedica ni una línea al mismo. Tamaña actitud provinciana es extensible al PP y al PSOE que mantuvieron el debate entre los cabezas de lista españoles, aunque coincidiera en el mismo dìa que el europeo. Lo dicho: unos provincianos. 

Los ciclones y el cambio climático

Un artículo publicado en "Nature" informa que los ciclones se dan cada vez más en latitudes altas, en ambos hemisferios. Según los datos aportados, los tifones del océano Pacíico y los huracanes del Atlántico son cada vez menos frecuentes en las regiones tropicales, donde hasta ahora se sucedían. En cambio, en las últimas décadas han aparecido más al norte y más al sur. En concreto, el estudio señala que esa migración se cuantifica en 53 kilómetros en el hemisferio norte y 62 en el sur. Ejemplos de este movimiento han sido el tifón Haiyán o los huracanes Katrina y Sandy. Los cientìficos tratan ahora se explicarse las causas de esta variación y no son pocos los que apuntan al cambio climático provocado por el ser humano. 

Sordera política

Teresa Ribera, quien fuera Secretaria de Estado de Cambio Climático en el gobierno de José Luis Rodrígue Zapatero, será acusada de prevaricación ambiental por la Fiscalía. Ribera firmó la Declaración de Impacto Ambiental que permitió la construcción de Castor, del almacen de gas submarino en la costa de Tarragón. La Fiscalía considera una negligencia que no se reclamara por parte de la Administración informes sobre peligrosidad sísmica al Instituto Geológico y Minero de España y al Instituto Geográfico Nacional. El Ministerio Público entiende que la posibilidad de terremotos no era un hecho impredecible, sino una posibilidad real por lo que debió ser objeto de valoración en la Declaración de Impacto Ambiental. Y que de haberse incluido dicho riesgo, habría condicionado la viabllidad del proyecto. En cualquier caso, lo relevante del caso pasa por poner en evidencia cómo se han eludido desde las instancias políticas los criterios técnicos necesarios para una obra de tal calado. Independientemente de que la Justicia termine su trabajo y sancione las irregularifades que se puedan haber cometido, lo interesante ahora es mirar para el futuro. Y evitar así que en el día de mañana los planteamientos políticos sigan desoyendo a los técnicos.

Ausencia de alarmas

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, ADIF, una entidad pùblica dependiente del Ministerio de Fomento, pagó por obras del AVE en Barcelona que no se llegaron a hacer. Hasta un cinco por ciento de los trabajos a realizar quedaron sin ejecutarse, pese a que se pagó el 100 por cien. Independientemente de las novedades que la investigación sobre estos extremos alumbre, llama poderosamente la atención que una empresa pública pueda incurrir en estas prácticas sin que salten todas las alarmas que deberían existir en todos los ámbitos, pero especialmente en llos de la Administración del Estado.

Lecciones de Donbás

El referéndum de autodterminación llevado a cabo ayer en la región de Donbás, no alcanza los niveles mínimos exigibles en una democracia. La votación se ha llevado a cabo en un marco violento, con milicianos armados en los centros electorales, y sin un censo definido en cada colegio, de tal manera que cualquiera podía repetir su voto. Y tal plebiscito se ha producido además en medio de una feroz lucha geopolítica con la que el nacionalista Putin busca ganar nuevas tierras, para Rusia, como ya hizo en Crimea Sin embargo, cabe preguntarnos si a alguien le queda alguna duda de que la mayoría de los pobladores de aquellla cuenca minera, que supone en términos económicos la quinta parte del PIB de Ucrania, ha optado por la secesión respecto a Kiev. En las próximas horas se conocerán los resultados, incluidos la abundante participación, y éstos no admitirán dudas sobre la claridad del resultado. Entonces, ¿deberíamos aceptar la autodeterminación expresada por esa mayoría de rusos, rusófonos o nostálgicos soviéticos? No. Lo que deberíamos rechazar son los sofismas implícitos en el derecho de autodeterminación. Y de que su puesta en práctica lo único que ha conseguido, históricamente hablando, ha sido traer más violencia a la tierra, en vez de solucionar los conflictos entre los seres humanos.

Sin comentarios

2008: unos meses después de la OPA de PRISA sobre Sogecable, Telefónica vendió su participación del 16,79% por 650 millones de euros. La plataforma de televisión de pago Canal + estaba valorada en ese momento en 3.860 millones de euros. 2014: PRISA acepta la oferta de Telefónica, vendiendo su participación, el 56% de la compañía, por 725 millones de euros. Canal + está valorada actualmente en 1.295 millones de euros. Sin comentarios.

Vuelve la polio

La Humanidad estaba a punto de hacer desaparecer la polio de la faz de la tierra, venciendo a una grave enfermedad, mortal o en el mejor de los casos gravemente discapacitante. La gente de mi generación recordará los estragos que hizo en este país atrasado de la dictiadura de Franco. En los últimos años, la enfermedad estaba reducida a dos focos: el golfo de África, con Camerún como principal afectado, y Oriente, con Pakistán a la cabeza. Los desastres provocados por el ser humano han llevado la extensión de la enfermedad en Asia a escenarios bélicos como Siria y Afganistán, así como otros no muy alejados de esa situación: Irán e Israel. En África, desde Camerún se ha extendido por Guinea Ecuatorial y Nigeria. Incluso de estos dos focos ha saltado, gracias al transporte por avión, a un tercer sitio: el Cuerpo de África. Somalia, Etiopía y Kenia han sufrido ya casos de una enfermedad que debería haber sido erradicada si la Humanidad no se empeñara en retroceder.

Más allá de la laxitud moral

En la construcción del AVE entre Madrid y Barcelona, en los años 2002-2009, hubo incrementos del precio de hasta 230% y unos desembolsos injustificados de 415 millones de euros, según ha puesto de relieve el Tribunal de Cuentas. Dichas irregularidades, independientes de las que investiga la Fiscalía Anticorrupción y que se han saldado de momento con diez detenciones, no son asumibles para un Estado que se reclama del Primero Mundo. Este país tiene un grave problema de corrupción. Pero más allá de la laxitud moral de nuestra sociedad, existe probablemente también una erronea concepción de cómo debe contratar la Administración y sus necesarios sistemas de control.

Una chica joven y con glamur

Ese fue el argumento que el entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, empleó para prescindir de César Antonio de Molina como ministro de Cultura y ser sustituido por Ángeles González Sinde.  Al menos eso es lo que ha contado ahora el afectado, el exministro César Antonio de Molina. Si así fuera, expresaría de una manera concluyente el desprecio y la inversión del valor cultural en la época actual. Estaríamos ante el grave hecho de un presidente del Gobierno que en vez de recurrir a la valía y bagaje de un personaje para ocupar un especial puesto público, se decante por otro, teniendo en cuenta que debe ser mujer, joven y con glamour. Tamaña frivolidad e inconsciencia  va a ser difícil de justificar, sobre todo por lo trágico de muchas de sus decisiones. Zapatero nos tenía acostumbrados a muchas cosas, efectivamente. Pero con ésto se lleva la palma.

Nacionalismo

Sin duda que es impactante que la Justicia británica haya tomado declaracion a Gerry Adams, presidente del Sinn Féin y uno de los antiguos dirigentes del IRA. El Gobierno del Reino Unido se ha desvinculado presurosamente de tal iniciativa, recordando algo básico en la democracia y que aquí en España sigue sin entenderse plenamente: la separación de poderes. También las terribles secuelas de la violencia. Como ha dejado en evidencia el hijo de la víctima mortal por la que Adams está siendo investigado. Michael McConville, hijo de Jean, la mujer asesinada por el IRA en 1972, ha dicho que dice conocer a los culpables, pero que tiene miedo a hablar. Pese a que le hierve la sangre, no acusará a nadie porque pese a los Acuerdos de Viernes Santo no tiene todas consigo de que su familia no sea objeto de represalias. Y eso que asegura que ha visto por la calle a los asesinos. Una de sus hermanas, en cambio, ha dicho que ella será valiente y sí colaborará con la policía. Pero sin duda lo más estremecedor es el relato de lo sucedido hace cuarenta y dos años: la desaparición y posterior muerte de Jean McConville, la madre de los diez hijos hoy dubitativos sobre lo que hacer. Jean tenía 17 años en 1952, veinte años antes de su muerte. Era protestante y vivía en un barrio de Belfast con mayoría de personas de esa confesión religiosa, cuando se enamoró de un católico, Arthur, de 29 años, que vivía en el mismo barrio y era un militar del Ejército Británico. Esa doble condición, la de católico y miembro del Ejército, no eran aún incompatibles. Entonces en 1952, pese a que la presión nacionalista tenía ya cerca de un siglo, aún no se había llegado al paroxismo que a partir de la década de los sesenta inundó todo en Irlanda del Norte. Eran raros los matrimonios mixtos, pero no se había instalado aún el odio de base nacionalista que arrambló con todo en muy poco tiempo. Se casaron y se fueron a vivir a Inglaterra, siguiendo los destinos del empleo militar de Artthur, hasta que este dejó el Ejército. La familia volvió a Irlanda del Norte y allí constataron que la rivalidad entre católicos y protestantes no había hecho más que aumentar. Los dos nacionalismos, el republicano y el unionista, habían convertido Irlanda del Norte en un infierno.  La situación era tan agobante que Arthur abandonó el barrio protestante donde vivían, refugiándose en casa de su madre, situada en un bastión católico. A esas alturas Jean había apostatado, convirtiéndose a la fe católica de su marido. Cogió a sus hijos y abandonó también su viejo barrio, yéndose la vivir a casa de su suegra.  Católicos y protestantes habían convertido Belfast en una sucesión de barrios diferenciados, en cada uno de los cuales solo se admitía una confesión religiosa. Pintadas y murales glorificando las propias convicciones no dejaba lugar a dudas donde uno se encontraba. De 1969 a 1972, miles de familias se desplazaron a barrios más seguros, donde la inmensa mayoría de vecinos eran de los suyos.  Arthur murió de cáncer de pulmón, dejando a Jean sola para sacar adelante a la abundante familia. Pero las penalidades no van nunca solas. Jean se enemistó con una familia republicana de su nuevo barrio. Las insidias contra ella empezaron. La acusaron de chivata. Unos matones del IRA la dieron una primera paliza. Y en diciembre de 1972 desapareció. Su cadáver no fue encontrado hasta 2003 en una playa de la Repùblica de Irlanda, a ochenta kilómetros de donde desapareció. Eso es el nacionalismo. Lo vimos en Irlanda, donde todavía supura la herida. Lo vemos ahora en Ucrania. Y desgraciadamente lo veremos en otros sitios.