El Comité de Sabios

La situación política italiana se encuentra en un callejón sin salida debido fundamentalmente a dos cuestiones: casi un tercio de los votantes apoyaron a un delincuente llamado Silvio Berlusconi. Y casi otro tercio dio su voto a un payaso: Beppo Grillo. ¿Y ante esto que se puede hacer? Poco, sin duda. Probablemente lo único que se puede intentar es lo que está procurando, con poco éxito, el presidente de la República: Giorgio Napolitano, un político de verdad, de aquellos que abundaban en la pasada generación. Y esa solución, transitoria a la fuerza, es confiar en un Comité de Sabios. De la solución no depende solo Italia, sino la Unión Europea, esa donde vivimos.