Última oportunidad

La intervención de ayer del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, se asemeja a la de aquel poderoso que da una última oportunidad al desahuciado. No afirmo categóricamente que así sea, pero da esa sensación. Salió Dragi y pronunció catorce palabras: "El BCE hará todo lo necesario para sostener el euro. Y, créanme,  eso será suficiente". De repente amainó la tormenta, nuestra prima de riesgo bajo 50 puntos de golpe y la bolsa subió un seis por ciento.  Las palabras de Draghi fueron saludadas en los países periféricos y criticadas duramente en el corazón de Europa, que teme una nueva ayuda a los pedigüeños a costa de los ahorros de los sufridos ciudadanos del norte de Europa.  Ahora habrá que esperar a la próxima reunión del Consejo de Gobierno del BCE, prevista para el jueves 2 de agosto, para ver como se concreta el aviso de Draghi. En cualquier caso y vista la reacción de los países adalides de la ortodoxia, Draghi no tendrá en el futuro mucho más margen de actuación. Por eso se impone, que en España, nuestros políticos, centrales y autonómicos, sean muy conscientes de que nos podemos encontrar ante la última oportunidad. No la estropeemos.