martes, 27 de octubre de 2015

Argentina



Los dos puntos de distancia a los que se ha quedado Mauricio Macri, respecto al candidato oficialista del peronismo, Daniel Scioli, obligan no solo a una segunda vuelta electoral en Argentina, sino que suponen un duro revés para el kirchnerismo que se perpetúa en el poder desde hace doce años, al modo de una dinastía de izquierdas.

Mauricio Macri, lícer de la Alianza Cambiemos, aglutina a una variopinta coalición de liberales y radicales, que se oponen al peronismo sempiterno de Argentina. Y especialmente a ese populismo que con Néstor y su viuda Cristina ha llegado al paroximo para desgracia de toda sudamérica.

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