Crisis del Periodismo

Jordi Evole arrasó en audiencia con su documental ficticio sobre el 23-F. Más de cinco millones de telespectadores siguieron el programa del presentador televisivo cuya credibilidad puede verse dañada, justificadamente, ante un ejercicio con el que pretendía ganar audiencia. La ficción documental es un género antiguo con ilustres predecesores, que han hecho mucho por el Arte. Bienvenido sea éste. El único problema que veo con la "Operación Palace" es la capacidad de alimentar sombras sobre aquel episodio clave en la democracia española. El hecho de aclarar al final del programa el carácter inventado del mismo no despejará las dudas de más de un fanatizado. Y exclusivamente en esto, radica mi crítica al programa. Y frente al documental de La Sexta, el otro gran grupo empresarial de la televisión, contraatacó con una flojísima entrevista de Risto Mejide a Rodríguez Zapatero. Un publicista metido a periodista, interrogando al anterior presidente del Gobierno. Entre los documentales de ficción y las entrevistas con falsos periodistas podemos hacernos una perfecta visión de la lamentable situación que padece actualmente el Periodismo. Sin duda que ello no es ajeno a la crisis social que sufrimos, pero la principal responsabilidad de este postrero estado la tenemos los propios periodistas.