117.000 españoles han salido de su país desde 2011 para buscar un futuro mejor fuera de nuestras fronteras. Además, el ritmo de abandono se acelera. En lo que llevamos de 2012 han sido casi 55.000. A esto hay que añadir que unos 365.000 extranjeros se han marchado en este año.
El segundo mal dato es que en nuestro país los sueldos han sufrido la mayor caída del poder adquisitivo de los últimos 27 años. Es decir, muchos españoles se van porque aquí no tienen opciones de tener un trabajo y los que lo conservan ganan cada vez menos.
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